“Un recuerdo no alcanza para hacer historia. Y la historia de un teatro, como la de cada uno, es también la historia de los demás, de cómo un arte como la danza migró y creció en diferentes latitudes. Las paredes del Royal Ballet atesoran las fotografías que narran el viaje recorrido, la historia reclama sus protagonistas y la danza en Argentina resplandece con cada uno de esos nombres. Con frecuencia, las instituciones se sumergen en un silencioso anonimato, sin rostros ni apellidos, evitando enfrentarse al eco del pasado. Son las organizaciones impulsadas y respaldadas por el ITI-UNESCO, como lo es el Consejo Argentino de la Danza, las que frecuentemente hacen de muralla que detiene al olvido.
“Estoy junto a ustedes en el compromiso de rescatar y revitalizar la historia de maestros, artistas y coreógrafos que han enriquecido el mundo de la danza, merecedores de ser escuchados por las generaciones venideras. Que sepamos todos que no somos espectadores, sino herederos de una tradición forjada con arte, dignidad y sacrificio, nutriendo nuestro camino con vocación y amor por la belleza. Si bien el futuro y el presente acaparan nuestra atención, sin el sólido cimiento del pasado, sin la fertilidad de nuestra tierra, el árbol de la danza no puede florecer. Las raíces son tradición y a la vez… nutrientes”.
SOBRE MARIANELA NÚÑEZ
Con una formación inicial en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón, Marianela Núñez, nacida el 23 de marzo de 1982 en San Martin, floreció como una figura destacada en el mundo del ballet. Ingresó al Royal Ballet de Londres en 1997, donde ascendió a bailarina principal. Su repertorio la ha llevado a cautivar audiencias globales con interpretaciones inolvidables en obras como “El Lago de los Cisnes”, “La Bella Durmiente”, “Romeo y Julieta” y “Giselle”. Reconocida con prestigiosos premios internacionales tales como el Premio Benois de la Danse y el Laurence Olivier Award, y premios nacionales como el Premio María Ruanova otorgado por el Consejo Argentino de la Danza y en 2010 el Premio Konex a la mejor bailarina de la década. Marianela ha recibido elogios de la crítica por sus interpretaciones, consideraron que su personaje de Aurora había sido el mejor del Royal Ballet desde 1946, demostrando su habilidad para cautivar al público con su expresividad y técnica excepcionales. “Su carrera revela no solo una destreza técnica, sino también su profunda nobleza y compromiso con la danza y las generaciones futuras. Su personalidad generosa y altruista la consagra como un faro de inspiración y un modelo a seguir en el mundo del ballet y más allá”, asegura el Instituto Internacional del Teatro.